El malestar de algunos aficionados de Tiburones Rojos de Veracruz se apreció ante la violencia que protagonizaron contra sus homólogos de Tigres de la UANL en las gradas del estadio Luis «Pirata» Fuente que podría sufrir un veto.
La Comisión Disciplinaria de la Federación Mexicana de Futbol, así como las autoridades de la Liga MX deberán analizar los videos, hechos y toda la causa para determinar algún tipo de sanción donde el veto está latente, situación que perjudicaría en demasía a Veracruz, por lo pronto la FMF abrió un proceso de investigación.
Se espera que el estadio Luis «Pirata» Fuente sufra un aviso de veto por infringir el artículo 51 del Reglamento de Sanciones y una multa económica.
Además el cuadro escualo recibió multa por sobrecupo de 848 mil 725 pesos dado que el estadio tiene capacidad de 28 mil personas y la víspera había poco más de 30 mil.
Los hechos violentos ocurrieron al término del encuentro que inauguró la fecha tres, donde los felinos ganaron 3-0, seguidores escualos recorrieron algunos metros en las tribunas del inmueble para encontrarse con los regios y de inmediato comenzar la gresca con golpes y el lanzamiento de algunos objetos.
Los elementos de seguridad tardaron en reaccionar y tal fue la violencia que jugadores de Tigres, encabezados por el técnico Ricardo Ferretti, se acercaron a la grada en la que se propició el alterado en busca de calmar los ánimos.
Dicha situación, incluso, ocasionó que el mediocampista Jesús Dueñas sufriera una cortada en el brazo a causa de un botellazo sin que la situación pasara a mayores una vez que se retiraron los futbolistas del cuadro norteño.
El hecho provocó también que se cancelara la conferencia de prensa con los técnicos, aunque el timonel de los jarochos, Carlos Reinoso atendió a los medios y lamentó lo ocurrido.
«No sé quién empezó, pero el dolor es muy grande, ver a tu equipo caer así, duele. Esperemos que no (haya veto). Esto es futbol, hay que jugar de igual a igual con todos los rivales. Sabemos dónde estamos metidos y tenemos que salir adelante”, mencionó Reinoso.
El enojo e impotencia de los locales aumentó ante la posibilidad de ubicarse últimos en la tabla del descenso en caso de que Morelia derrote a Toluca, sin que eso justifique los actos de violencia.