El dramatismo del Veracruz se extiende hasta conocer qué sucederá en el momento del silbatazo inicial del partido entre los Tiburones Rojos y Tigres.
Los supuestos adeudos de pagos por parte de la directiva jarocha, en la que se señala a Fidel Kuri Grajales como principal responsable, crearon una “unión” entre futbolistas y entrenadores de la Liga MX, pero sin fondo.
Isaác Brizuela (Guadalajara), Edwin Cardona (Pachuca) y Noé Maya (Atlético de San Luis) declararon en conferencias de prensa que respaldan a los jugadores de los Tiburones Rojos.
Rodolfo Pizarro, Miguel Layún (Monterrey), Antonio Briseño y Oribe Peralta (Chivas) retuitearon el hashtag #Hoypormimañanaporti que publicaron varios escualos… pero hasta ahí.
Ninguno prometió detener los partidos de esta semana por las situaciones que rodean al Veracruz. Quieren ayudar, dicen, pero sin comprometerse.
Robert Dante Siboldi, entrenador del Cruz Azul y ex de los jarochos, señaló a la Federación Mexicana de Futbol (FMF) de hacerse cargo de la situación. El uruguayo negó que en su paso por el puerto (diciembre 2018 a abril 2019) viviera una situación similar.
“No tengo idea si hay dobles contratos o de palabra. A mí, en lo personal, no me tocó alguno”, comentó el celeste, quien también respaldó a Kuri.
“Me imagino que Fidel no la debe estar pasando bien. Lo conozco y no quiere estar en la situación, seguramente le gustaría estar al día. Desconozco la situación económica. Los jugadores están en su derecho de exigir el pago”.
Los que no aparecen son los “líderes” de la Asociación de Futbolistas Mexicanos, como Javier Hernández, Andrés Guardado, Guillermo Ochoa y Jesús Corona. De ellos, silencio absoluto.