El que a Fidel Kuri e hijo no se les haya permitido el ingreso a la Asamblea de la Liga MX, no es nada más que el inicio del proceso de desafiliación para el club Tiburones Rojos de Veracruz.
Las horas están contadas. A Kuri le fue comunicado, en plena puerta de la FMF, por un apoderado legal de la Federación Mexicana de Futbol de nombre José Carlos Das Hurtado, que por orden de la presidencia ejecutiva, y en base al reglamento interno de la Federación, «sólo tendrán derecho de asistir a la Asambleas, los clubes que se encuentren en pleno ejercicio de sus derechos, a través de su respectivo dueño o representante titular (…) Con fundamento en este artículo no se le permitirá el acceso a la Asamblea… El club Veracruz a consideración de la Federación no se encuentra al corriente«.
Kuri estuvo 90 minutos más en la calle, arriba de su camioneta, esperando que se le entregara un oficio oficial, trató que su hijo, Fidel Kuri Mustieles presidente del club pudiera ingresar y al seguir la negativa, se retiró…
¿Ahora qué sigue?
Se concluirá con la investigación que se le realizó al club Tiburones Rojos, que son acusados de no cubrir con pagos de jugadores y cuerpo técnicos, cuotas, además de faltar reiteradamente al código de ética en el caso de su dueño, Fidel Kuri Grajales.
Lo que procede como siguiente punto es que la Asamblea de la Federación Mexicana de Futbol, que reúne a representantes de la Liga MX, el Ascenso MX, Liga Premier, Femenil y Amateur, tomen la resolución final la cual será inapelable. Se espera que esto ocurra a más tardar el próximo viernes.
En todo caso, faltaría saber si Fidel Kuri ya tuvo oportunidad de defenderse.