Diego López Díaz dará su máximo esfuerzo en el primer selectivo para los Juegos Parapanamericanos del próximo año en Lima. El nadador veracruzano ya está instalado en Acapulco y con la mira puesta a realizar un buen evento, según lo explicado por su entrenador Fernando Rafael Gutiérrez Vélez.
“Creemos que con la ayuda de Dios no va a tener ningún problema, él no va a estar descendido, él ya dio marca para estar en los Juegos Panamericanos, este preámbulo es una parte que nos va a servir de preparación.
“Él va a participar en los dos selectivos con carga de intensidad, lo cual nos permite definir cualquier variante en la preparación final hacia los Juegos Panamericanos y el Campeonato del Mundo”, indicó el destacado entrenador.
De igual modo, Gutiérrez Vélez hizo ver que el ganador del Premio Estatal del Deporte estará en condiciones especiales de trabajo forzado.
“Para ver cómo y hasta qué punto podemos desarrollar, ya que él a veces tiene problemas con la reproducción de glucógeno, debido a su discapacidad.
“Entonces lo monitoreamos con mucho cuidado y en este momento no vamos a cuidarlo, lo estamos dejando con cargas todavía para que, en el momento adecuado del selectivo, no corra ningún riesgo de que llegue con un trabajo lactácido, pero que no nos afecte”, apuntó.
Esto ayudará a que López Díaz para medir aspectos en la frecuencia cardiaca, que servirá para determinar el último proceso rumbo a las justas internacionales del 2019.
Las pruebas que el xalapeño enfrentará en Acapulco son 50, 100 y 200 metros libres, 50 metros dorso y pecho, así como el combinado en 150 metros.
“De hecho el día de la competencia él va a entrenar en la mañana y al terminar (sus pruebas) va a volver a entrenar, no tanto para cansarlo, sino llevarlo con carga, porque tendrá un descanso un día antes.
“Queremos verificar en sistema lactácido cómo nos va a responder y eso es lo más importante de esta temporalidad, él está completamente consciente de la situación”, subrayó Fernando Gutiérrez.