Por Carlos Moron
La lanzadora de bala para olímpica, Ángeles Ortiz, se mostró contenta con la marca conseguida en el Grand Prix de Dubai, competencia por la cual se adjudicó la medalla de oro.
Ante esto comentó, «ahorita fue en el Gran Prix de Dubái, es la quinta vez que participamos y bendito Dios siempre ganando medalla de oro para México, crecimos 51 cm de la misma competencia el año anterior, en la misma fecha, en el mismo certamen, el año pasado dimos 10.23 y ahorita dimos 10.74 metros, entonces esos 51 cm es lo que se ha trabajado, estamos hablando de lanzamiento de peso».
Ahora su meta más próxima es imponer un récord mundial en los Juegos Para Olímpicos así como ganar de nueva cuenta una medalla, «oro en lanzamiento de bala es lo que queremos y si Dios quiere récord del mundo en Río».
En otros temas señaló que se le debe la beca deportiva del IVD donde son 10 meses de las becas que se deben otorgar a los atletas y reconoció que únicamente le pagaron uno y eso porque tuvo que solicitarlo por una emergencia familiar.
Reconoció que solo vive con el apoyo de la CONADEM «nosotros dependemos de CONADE, CONADE nos apoya con una beca y por eso podemos respirar y florar pero sí nos hace falta el apoyo de nuestro estado al que representamos y que además es algo que ya nos ganamos».
También mostro su punto de vista sobre su compañera deportista Nelly Miranda, donde destacó que respeta su decisión, dejando en claro que espera sea por ayudar y no por beneficio propio, «yo respeto mucho a todos lo que quieren entrar a la política, adelante, ojalá ella haga un buen papel, ojalá y ayude mucho y no nada más saque en beneficio propio».
Sobre si ella pudiera incurrir en la política, detalló que ella es deportista, «no muchas gracias, yo soy deportista y soy feliz, yo me mantengo al margen porque o soy deportista o soy política, entonces por el momento soy deportista».
Y para finalizar, destacó «yo tengo la voz autorizada como deportista pero no tengo ningún poder político y cuando eso pasa es tan difícil luchar contra corriente ayudar, la pena es que cuando llegues no los ayudes, cuando puedes hacerlo».