LAS VEGAS, EU., diciembre 9 (EL UNIVERSAL).- La sonrisa de Orlando «Siri» Salido (44-13-4, 31 KO’s) se hace añicos cuando observa lo marcado por la báscula del lujoso hotel Mandalay Bay. La pelea de este sábado por la noche frente a Miguel «Micky» Román (57-12, 44 KO’s) está pactada a 131 libras, pero la romana marca 132. No le queda más que hacer un segundo intento, sin ropa.
Su equipo de trabajo pone varias toallas frente a él para no hacer más incómodo el momento. No cambia mucho. Marca 131.5. Debe bajar esa media libra o sufrir una multa de casi 20 mil dólares, por parte de la Comisión Atlética de Nevada.
El «Siri» se va a su habitación para seguir el plan que le dan sus colaboradores, no sin antes presenciar cómo Román registra 130.5. Su adversario no tiene problemas. Antes de comenzar con el ritual para bajar aún más de peso, decide probar en su báscula personal, en la que sí da las 131 libras.
Es entonces que se llama a las autoridades para una segunda prueba. La pasa fácilmente. Todo se debió a que la romana estaba mal calibrada. El resto de los púgiles que integran la cartelera libraron sin sobresaltos a su primer obstáculo.