Al Calor Político




VISÍTANOS DESDE TU MÓVIL
Al Calor Deportivo

El Rebaño gana el ‘Clásico Tapatío’; 1-0 al Atlas

Con gol al minuto 92 de Jair Pereira, el Rebaño derrotó 1-0 a los rojinegros y se metió a la lucha por la...

El Universal

La agonía del encuentro demuestra que mientras el árbitro no silbe el final, todo es posible. Así es el futbol, capaz de construir historias de gloria en tan solo un instante. Por eso, cuando el cabezazo de Jair Pereira llega a las redes, la explosión de la tribuna es apoteósica. El 0-0 se había extendido hasta la compensación. Y en un chispazo, Chivas se lleva el Clásico Tapatío.

Su festejo es de tipo militar. Corre al banderín desde donde había salido la pelota que lo baña de gloria. Se lleva la mano derecha a la frente. Por eso es el “Comandante” del Rebaño Sagrado. El zaguero central define el duelo del honor. El orgullo de la ciudad. Al menos por hoy, Guadalajara es de Chivas. Así pesa este encuentro.

Pocas veces se ve un Clásico con equipos de ideas tan disímiles. Chivas apuesta a su estilo de siempre. Busca la pelota en pos del protagonismo. Atlas, en cambio, se repliega: dos líneas de cuatro separadas apenas por 10 metros de distancia durante casi todo el primer tiempo. Apuesta a un “latigazo” al frente o un error del rival.

Así, la redonda se vuelve rojiblanca. El Rebaño Sagrado “inclina” el campo. Se adueña del trámite. Y los Zorros de Gustavo Costas parecen cómodos con eso. Guadalajara toca y toca. Le falta profundidad. No encuentra espacios cuando los Rojinegros meten a los 11 en su propio campo.

El partido es así. Y de repente, Chivas empieza a encontrar huecos en la bien ordenada defensa visitante. El primer aviso lo da Carlos “Gullit” Peña. Conduce. Levanta la mirada. Toca profundo. Isaac Brizuela entra al área. Cuando intenta quitarse de encima al arquero Óscar Ustari, le puntean la redonda. Se acaba el peligro, al ’23.

Después, encuentra claridad. Pero falta contundencia. Edwin Hernández, agregado al ataque, sirve de gran manera. Al hueco. Deja solo a Omar Bravo. El capitán, titular hoy por la lesión del joven Ángel Zaldívar, encara al guardameta. Define de zurda. Cruzado. Ustari levanta la mano izquierda. Con puro reflejo, tapa al ’24.

La fórmula se repite al ’31. El “Aris” Hernández de nuevo agregado al ataque, toca profundo. De nuevo para Omar Bravo. Otra vez el capitán rojiblanco dentro del área. Ustari le achica. El veterano delantero patea de zurda. El arquero le tapa con la rodilla. Perdona el Guadalajara, por segunda vez

Cuatro minutos más tarde, Bravo recibe por el costado izquierdo. Rafael Márquez sale a la marca. Mano a mano entre dos históricos del futbol mexicano. El rojiblanco mete el acelerador. Se lleva con relativa facilidad al ex jugador del Barcelona. Las piernas ya no son lo mismo. El mochiteco ingresa al área y cruza un servicio cargado de veneno, pero que nadie alcanza a empujar al arco.

La apuesta del Atlas se reduce a un “latigazo” que “mate” al rival. Y casi le sale. Minuto 43. Pelota larga para Alfonso González. Toma a la defensa rojiblanca mal parada. El regreso es de Jair Pereira. “Ponchito” se dispone a rematar, solo dentro del área. La barrida del zaguero es extraordinaria. Apaga el peligro

Para la segunda parte, los Zorros salen menos encerrados. Toman la redonda en los primeros minutos e intentan atacar. Falta imaginación. Pero al menos ya hay intención de algo más que solo esperar al adversario. El duelo se vuelve más parejo. Disputado como suelen ser los Clásicos.

Jesús “Chapo” Sánchez llega a línea de fondo. Su diagonal retrasada encuentra al “Gullit” Peña completamente solo. Pero hay confusión. Isaac Brizuela se adelanta a su compañero, que venía de frente. Le quita la oportunidad y no es capaz de rematar a gol, al ’52.

Atlas se acerca a pelota parada, algo que a Chivas le había dado varios dolores de cabeza, sobre todo al arranque del torneo. Tiro cargado al costado izquierdo. Gonzalo Bergessio le gana por arriba a sus marcadores. El cabezazo del argentino pasa apenas centímetros a un costado del poste, al ’57.

Con el trámite ya equilibrado, los Zorros se atreven a más. Álvaro “Tata” González levanta la mirada. Encuentra un compañero solo a la izquierda. Dentro del área, Alfonso González controla con el pecho. Sin dejar caer la redonda, remata de pierna derecha. El travesaño le niega el gol a “Ponchito”, al ’70. Guadalajara se salva.

El Rebaño Sagrado pierde orden conforme avanzan los minutos. Desde la salida de Omar Bravo, se queda sin un 9 natural. La presencia de la “Chofis” Javier Eduardo López no pesa, de inicio. Matías Almeyda corrige el funcionamiento con el ingreso de Michel Vázquez. Con la referencia de un centro delantero, el equipo se nota más cómodo.

Pero Atlas ya es peligroso a estas alturas del encuentro. Álvaro González dispara desde fuera del área. Tapa la defensa y le rebota al mismo “Tata”. Le queda a Gonzalo Bergessio, quien define con un estupendo remate por encima del arquero. Se estremecen las redes, pero el árbitro Roberto García anula por un claro fuera de lugar, al ’80.

Dos minutos más tarde, el mismo Bergessio controla por el costado izquierdo. Ingresa al área. Recorta al centro. Saca un derechazo que busca el ángulo más lejano. Rodolfo Cota vuela. Parece imposible. A contramano. Con la derecha, le arrebata el grito de gol a los Rojinegros. Atajadón del rojiblanco.

En la recta final, el partido ya está para cualquiera. Atlas ha creado mayor peligro en la segunda parte. Pero Chivas se aferra a la esperanza de ganar. La “Chofis” toma el esférico en la orilla del área. Recorta una vez. Luego cambia de pierna nuevamente. Saca un zurdazo que busca el poste. Óscar Ustari vuela. Atajadón del rojinegro, al ’87.

Vieja sentencia futbolera: el último minuto también tiene 60 segundos. Agoniza el Clásico Tapatío. Tiempo de compensación. Tiro de esquina por el costado derecho. Raúl “Deditos” López centra con pierna derecha. Felipe Baloy se pierde en la marca. Jair Pereira pega u salto monumental. Un cabezazo sólido. Pegado al poste. El lance de Ustari adorna la estampa. Imposible de alcanzar. A las redes. Gol del Rebaño Sagrado. El Estadio Chivas es una locura.

El zaguero central rojiblanco corre hacia el banderín de tiro de esquina desde donde salió la pelota que lo ha bañado de gloria. Sus compañeros lo persiguen. Llueve cerveza por todo el estadio. Los extraños se abrazan. Es una fiesta en rojo y blanco. Pereira se lleva la mano derecha se lleva la mano derecha a la frente. Saluda como militar. Por algo es el “Comandante” del Guadalajara.

Es para los rojiblancos el Clásico Tapatío. El orgullo de la ciudad. Tercer triunfo consecutivo frente al Atlas. Quinto en los últimos seis partidos de la Liga MX. Ya son 15 de los más recientes puntos disputados. El Rebaño Sagrado está enrachado. Al llegar a 21 puntos, sueña con la Liguilla. Pero este domingo, goza algo más que eso: disfruta el honor de decir que Guadalajara es de Chivas.