- Dique, Proquiver, Dique Buenavista y Rébsamen se juegan el pase a la final del futbol Premier FUV
- El representativo veracruzano se coronó monarca en el voleibol máster de los 52 Juegos Nacionales INDET
- América consigue agónico pase en penaltis; enfrentará al Toluca en la Liguilla
- Atlas elimina a Chivas del Play-In con gol de último minuto; ya esperan rival entre Xolos y América
- Otilpan invita a torneo de futbol con premio de 10 mil pesos
- Tres jugadores de Halcones fueron convocados para representar a México con miras a la AmeriCup 2025
- Racing de Veracruz prepara su ataque a la Universidad Autónoma de Zacatecas
- Tras coronarse campeón supermosca FECOMBOX, el peleador Miguel Ángel Rodríguez se alista para futuras contiendas
- México le remonta a Honduras y avanza a las semifinales de la Nations League de Concacaf
- Jugadores del Racing de Veracruz entrenan selectivo de la Liga Premier Sub-19
Preparan las leyendas de Rébsamen el festejo de los 50 años del equipo
- Escrito el:: 23 mayo, 2022
Celebrarán como se debe, digno a su nombre, su linaje, sus dinastías, sus legados y sus leyendas
Por Julián Rodríguez
El futbol era su pasión, su adicción, casi casi una religión, en su niñez lo que más querían por encima de todo y de todos.
Eran los chiquillos del Rébsamen, un equipo que está próximo a cumplir 50 años de vida y que lo celebrarán como se debe, digno a su nombre, su linaje, sus dinastías, sus legados y sus leyendas.
Recordar para ellos es volver a vivir esos momentos cuando se trasladaban para jugar una cascarita en un lugar en el que la tierra y las piedrillas eran comunes y de donde nadie los podía arrancar, en la calle Díaz Mirón, donde el paso de los autos era casi nulo.
Sus leyendas se echan atrás en el túnel del tiempo para revivir sin duda sus mejores tiempos, sus épocas inolvidables cuando todos felices corrían detrás de una pelota.
Seis de ellos aún viven y nos trasladaron a ese tiempo que desafortunadamente ya no volverá. Ellos son Miguel Ángel González, Renato Landa García, Mario Ortiz Olivares, Jorge Antonio González, Armando Gómez Salazar y Bernardo Ortiz Olivares, lamentablemente muchos de sus fundadores ya no están entre nosotros.
“Teníamos como 12 años cuando nos reuníamos para jugar en esa calle y también en la Cayetano Rodríguez”, dijo Miguel Ángel González, quien como en sus demás compañeros los cambios en el tiempo se van notando.
“Luego nos inscribimos en la antigua Liga Xalapeña, en la que tras dos o tres torneos nos coronamos en la categoría Segunda Fuerza”, recordó.
El entrevistado sacó del ropero de sus recuerdos el primer título obtenido y señaló que fue ante Roa Bárcenas, plantel que se creía superior y que ganaron el primer partido, por lo que para el segundo ya tenían preparada la fiesta, pero se la aguamos porque ganamos el segundo partido y nos fuimos a otro y también salimos victoriosos”, precisó.
La aguerrida escuadra estaba integrada por auténticos guerreros de los campos, esos que nunca dejaban de luchar, que siempre jugaron por amor a su equipo, a su calle, a su barrio y que defendían los colores de su playera como algo sagrado.
Es por eso que muchos de sus encuentros terminaban en broncas campales. “Si, es cierto, tuvimos muchas rivalidades con otros barrios como la Dos de Abril, la Aguacatal, San Bruno, Dique y Colfraima”, destacó.
Por su parte, Renato Landa García expuso que en los inicios de la década de los 80´s se dieron un agarrón en los otrora Campos Juárez con la colonia Francisco I. Madero. “Fue una época muy bonita, demasiado bonita, pero me acuerdo de un pleito contra Colfraima. Yo tenía amistad con el ´Apache´ Mario Ronzón y en plena bronca alguien sacó una cadena de bicicleta (objeto que antes lo utilizaban para agredir) y lo iban de descontar, pero metí la mano para que no le pegaran y me tocó a mí, la verdad fue una terrible bronca”, comentó.
Con Dique era también imposible que no terminara en pleito. “Si, nos pelamos también con ellos, pero ahora que ya estamos viejos ya somos amigos”, mencionó.
El escuadrón de ese barrio estaba integrado con futbolistas de la talla de Armando López, Alejandro López, Arturo García Ojeda, Renato Landa, Miguel Ángel González, Luis Reyes, Margarito García, Gerardo Gutiérrez, Julián Mora, José Luis Sánchez, Abel Hernández, Fernando Hernández, Rolando Roa, el “Chiquis” Antonio Madrid y Jorge Antonio González, entre otros., aunque varios de ellos ya emprendieron el viaje sin retorno.
Sobre su celebración, coincidieron que lo realizarán a fin de año. “Es con tiempo para que hagamos un festejo en grande, digno al equipo”, sostuvo Miguel Ángel González.
Este fue tan sólo un pasaje, una escena en la vida de un tradicional equipo que en sus inicios se integró con puros valedores, amigos o cuates de barriada, niños que no tenían los lujos como algunos otros en su tiempo, que sus playeras, sus calcetas y sus “shorts” estaban remendados y que a veces tenían que pedir prestados o regalados sus tacos de futbol para jugar, pero que la entrega y coraje que mostraban en cada partido fue el arma letal que poseían y que provenía de su corazón hasta convertirlos en leyendas.