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Nationals consigue su primer triunfo en la Serie Mundial

El plan de trabajo que traía era a base de rectas, lanzamientos a los que los Astros les batearon precariamente cuando se enfrentaron a...

Nacieron producto de la expansión de 1969 como los Expos de Montreal. Promediaban 12 mil aficionados por partido en Quebec y fueron siempre equipo de mercado chico, de hacer más con menos. La vez que más cerca estuvieron de llegar a una Serie Mundial…..no hubo Clásico de Otoño en 1994 por una huelga que reventó esa temporada y cuyos efectos se han sentido por muchos años.

 

Tuvieron que mudarse a Washington cuando MLB tuvo que tomar control de ellos por las pérdidas en suelo canadiense. Ahí, comenzaron a probar las mieles de un mercado decente. El tema ya no era ver si podían retener al prospecto brillante que se hacía agente libre, sino traer buenos agentes libres para buscar el campeonato.

 

Una de esas firmas fue Max Scherzer, que hoy, no teniendo lo mejor de sí quizá por el largo descanso entre que eliminaron por barrida a los Cardinals en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional y el inicio de la Serie Mundial, pudo darle a su manager 5 entradas en 110 lanzamientos y agenciarse la victoria al son de 5 carreras por 4, ponchando a siete bateadores de Houston, otorgando tres bases por bola y con labor de 5 imparables.

 

En la primera entrada inició titubeante. El plan de trabajo que traía era a base de rectas, lanzamientos a los que los Astros les batearon precariamente cuando se enfrentaron a los Yankees. Ahora venían por ellas y después de abrir dándole base por bola a Geroge Springer, admitir imparable de José Altuve, comenzó a trabajar con sliders. Ahí logró ponchar a Michael Brantley y Alex Bregman, pero el cubano Yulieski Gurriel le prendió un sinker que nada se hundió para un doblete por el izquierdo que trajo a los dos corredores para poner arriba a los Astros 2 por cero.

 

Mucho se habló de como el descanso podría afectar a Nacionales, considerando que de los últimos siete equipos que han descansado seis días o más con miras a la Serie Mundial, solamente los Medias Rojas del año pasado han podido ganar el Clásico de Octubre, pero en la misma alta de la segunda, Nationals le puso número a la casa sobre el abridor de los texanos, Gerrit Cole, mediante cuadrangular de Ryan Zimmerman, otrora prospecto de primera ronda que a diferencia de Montreal, Washington si pudo retener y que la mandó al descanso eterno por todo jardín central convirtiéndose en el tercer bateador debutante más viejo en Serie Mundial en conectar en su primer turno un vuelacercas para el 2 a 1.

Así se mantendrían las cosas hasta que el dominicano Juan Soto la caminó por el izquierdo ante Cole para empatar el juego a dos carreras por bando. Scherzer fue poco eficiente con sus lanzamientos y hay que decir que la estricta zona del umpire Alan Porter no ayudó mucho a que lo fuera. En la quinta alta sus compañeros habrían de construir para él la ventaja que terminó resultando decisiva.

 

Sencillo de Adam Easton trajo primero al plato a Kurt Suzuki, que a la defensiva como receptor tuvo una brillante actuación y posteriormente, el propio Soto se destaparía con doblete a las tablas del izquierdo para empujar a Víctor Robles y Anthony Rendón poniendo el negocio 5 carreras por dos.

 

En la sexta por la cuenta de pitcheos, tuvo que salir Scherzer, ingresando el zurdo Patrick Corbin, que se espera que abra el tercer juego allá en Washington, lo que es práctica común. En vez de tirar la sesión de bullpen que hacen todos los abridores a la mitad del periodo entre una salida y la siguiente, Corbin tiró una entrada en la que rindió buenas cuentas. En la séptima ingresó Tanner Rainey a recibir de entrada un macanazo del que fuera MVP del Clásico de Otoño de hace dos años, George Springer por todo el left, ante lo cual y tras ponchar a José Altuve, el piloto Martínez decidió traer a sus únicos dos brazos de relevo de confianza en el orden acostumbrado.

 

Primero el diestro Daniel Hudson, que laboró una entrada y un tercio permitiendo una más con doble de Springer en la octava y para cerrar, el zurdo Sean Doolittle, que retiró la novena para apuntarse el rescate en tres bateadores, arrojando un balde de agua helada sobre un Minute Maid hasta las lámparas.

 

Así, los representantes de una ciudad que beisbolísticamente no gana el campeonato desde 1924 y que no ve una Serie Mundial desde 1933 y que en los hechos eran un equipo que jamás se había parado en una Serie Mundial, hicieron historia y taparon muchísimas bocas con este inesperado triunfo.

 

La victoria fue para el heterocromático Scherzer (tiene los ojos de diferente color) y la derrota fue para Gerrit Cole que tenía 25 salidas sin conocer la derrota. Cole será agente libre terminando este evento y si así lo decide para probar suerte en el mercado, Scherzer también si opta por renunciar a los dos años que todavía le quedan a su contrato buscando mejores emolumentos, cosa para lo que hoy es una carta credencial importante.

 

Mañana están anunciados Zack Greinke por los Astros, quien en postemporada flaquea aún más que Clayton Kershaw atendiendo quizá al desorden de ansiedad social que padece y Stephen Strassburg por los Nacionales, pitcher al que históricamente no le va bien cuando descansa por periodos largos, considerando que su cambio es la parte más fuerte de su arsenal y que, en este tipo de salidas, tiene una efectividad de más de cinco limpias por cada nueve entradas de labor; en un juego que es para los Astros de vencer o morir.